Gracia y Paz

Todas las cartas que escribió el Apóstol Pablo en la Biblia, comienzan con este saludo, que es un exquisito deseo del corazón: "Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo, les concedan gracia y paz". Estas dos palabras, gracia y paz están cargadas de significado y de valor para los seres humanos. Veámoslo.
Primero aparece la gracia, término tiene varios sentidos: uno de ellos es encanto o atracción.
La gente dice !Que gracia tiene dicha persona!!Me ha caído en gracia! . También significa agradecimiento: que es una señal de gratitud. Y finalmente favor: esta es la típica expresión de la gracia.
La gracia es, en términos cotidianos, recibir algo que no esperábamos o merecíamos. Es obtener ayuda sin pedirla, amor sin reclamarlo, compasión sin ver la necesidad.

Esta palabra no es usada habitualmente, pero si tenemos un corazón sensible, solemos actuar con gracia: Ayudando a un anciano, colaborando en alguna maniobra con una persona minusválida, aportando alimentos a los necesitados, consolando a un enlutado, apoyando una causa justa, colaborando en una catástrofe o desgracia, defendiendo al desamparado. Estas y muchas otras son acciones llenas de gracia: Estamos haciendo un favor, sin que nadie lo pida, solo por convicción propia. Alguien definió a la gracia como “el amor que se inclina” al necesitado.
No es el amor que sonríe y sigue de largo sin entrometerse. Es el amor que vé la necesidad y actúa.
Nuestra sociedad, cargada de problemas, injusticias y desesperanzas, necesita de la gracia. Jesús lo sabía muy bien, por eso una de las cualidades que identifica su persona cuando andaba por este mundo, era su gracia.
La Biblia dice que sus actos reflejaban “la grandeza de su persona, llena de gracia y de verdad”
Jesucristo fue quien mostró fehacientemente la gracia de Dios hacia la humanidad. El no tenía porque venir a este mundo, mezclarse con las personas y sus miserias, sin embargo lo hizo para poder entender nuestra necesidad y como tal, hoy puede ser un perfecto intercesor entre nosotros y Dios, porque el padeció las miserias de este mundo, pero se mantuvo apartado de la maldad. Su vida fue tan agradable a los ojos de Dios, que pudo cumplir la ley divina por nosotros y así ser nuestro representante. Quien reconoce que su sacrifico en la cruz fue por nuestra maldad y pecado, obtiene la gracia de ser perdonado y reconciliado con Dios
Así de importante es esta palabra. Gracia recibida de Dios para estar reconciliados con el y gracia para aplicar a la vida diaria, con nuestros semejantes.
El otro término del saludo paulino es paz. Los hebreos usan la palabra shalom
Shalom se traduce como paz. Es un saludo, tal como “hola” o “chau.” Pero también es un concepto más profundo. Remite a un estado de perfección y de armonía, de estabilidad y de bendición. Shalom es reparar los daños, pagar las deudas, retribuir en la justa medida.
Dios en el cielo está en perfecta armonía. Cuando hubo creado la tierra pudo reposar el día séptimo.
Sin embargo, este reposo de paz fue perturbado por el pecado del hombre, y mientras el hombre no tenga el perdón de sus pecados tampoco tendrá SHALOM.
Todo aquel que no reconoce a Cristo como su Salvador carece de esta profunda paz, de este reposo.
El hijo de Dios descendió del cielo a la tierra como verdadero hombre. Clavado en la cruz, en su muerte, realizó una obra perfecta. Exclamó: Consumado es, en su lengua materna NISHLAM. Fue la voz de victoria del Señor, que significa: la obra está hecha, la obra de reconciliación está terminada: esto es verdadera paz. Por este sacrificio de paz todo aquel que encuentre en esta obra la paz con Dios recibirá de èl, Vida eterna cerca de Dios.
De uso cotidiano y concreto, la forma verbal de shalom significa “pagar.” Pero este pago no es un favor o regalo, sino es más bien una obligación que surge de un acuerdo entre personas que requiere una relación de confianza. Cuando cumplimos tales obligaciones, estamos haciendo shalom.
Shalom significa también “suficiencia” que incluye comida, techo, vestido, tierra o trabajo. Es estar satisfecho porque nuestros deseos legítimos se han conseguido. Es suficiencia con relación a la abundancia, no suficiencia con relación a la escasez.
En los evangelios, este concepto aparece en una escena en la vida de Jesús. Está en un lugar desierto, una multitud hambrienta lo sigue y sólo hay cinco panes y dos peces para alimentarla. Pero la escasísima comida es repartida, y por milagro todos comieron y todos se saciaron. Y lo que es más, las sobras llenaron doce cestos. La escasez transformada en abundancia. Shalom reafirmada nuevamente
No es paz de la mente sino la que está fundada en la justicia, es algo que nosotros hacemos, no algo que sentimos. No es solo aceptarnos unos a otros, o de perdonarnos y alentarnos unos a otros. Shalom surge de ejercer la justicia unos con otros, y para muchos de nosotros eso significa ir más allá de nuestra familia y amigos, significa ir más bien hacia nuestros hermanos y hermanas que no tienen suficiente, que no pueden cubrir sus necesidades, cuyos pactos han sido violados, cuyas posesiones son destruidas.
Paz, o Shalom, es algo que viene de Dios pero que también debemos ejercer, para ser sus seguidores.
Deseo que todo mi corazón que los lectores del Ancla del alma, tenga gracia y paz de parte de Dios, como resultado de su comunión con él y que gustando de estos dones divinos, también la entreguen a sus prójimos, como Dios espera que vivamos.