Fair Play

Cuando los equipos salen a la cancha en un partido por el campeonato mundial de futbol junto con las banderas de los respectivos países, un grupo de niños y jóvenes extienden una bandera amarilla con la leyenda: Fair Play que viene a representar a la deportividad en el juego
La deportividad se puede definir como la actuación correcta y educada que se debe observar en todo deporte y forma parte fundamental del fútbol. Representa las consecuencias positivas de jugar según las reglas, usar el sentido común y respetar a los compañeros, árbitros, rivales y aficionados.
Desde 1997 la FIFA dedica cada año una semana de su calendario internacional a elogiar y promocionar el espíritu del juego limpio. El juego limpio se reconoce y recompensa también en todas y cada una de las competiciones de la FIFA. El Premio Fair Play se concede al equipo que haya hecho gala de mayor deportividad durante el campeonato.
El galardón suele recaer en individuos o grupos que normalmente no gozan de gran relevancia o popularidad en la prensa ni entre el público.

Mundial de Futbol, 1914

En la Navidad de 1914 y en plena primera guerra mundial, el káiser Guillermo II dio la orden para que los soldados alemanes recibieran más comida, más vino y, por supuesto, los tradicionales arbolitos, hechos con gajos de cipreses y velas pequeñas. La orden tenía la intención de levantar el ánimo de los soldados estancados en esas inmundas zanjas llamadas trincheras, donde se desarrolló gran parte de esa cruel guerra. Las trincheras recorrían toda la frontera occidental de Bélgica y a escasos cien metros en frente, otra cadena de trincheras de los aliados franceses e ingleses serpenteaba esa frontera. Desde cada una de ellas se disparaban granadas, morteros y proyectiles varios que hacían estragos en cada fila enemiga. Al espacio que separaba ambas trincheras se le llamaba “Tierra de nadie” y allí se podían encontrar centenares de cadáveres a causa de las explosiones y que no podían ser sepultados por el peligro que representaba para cada bando asomarse a buscarlos.