COMPAÑERO


Es esta una palabra muy común sobre cuyo origen no se ha llegado a un acuerdo total, no hay seguridad sobre su etimología. Lo que se ve en la palabra es el predominio del com, el prefijo de compañía, con el que se construye una palabra cuyo contenido esencial es precisamente ese, el de la compañía. En el latín vulgar, el que usaba el pueblo el supuesto término companio, sería el resultado de combinar cum y panis y se referiría a aquel con quien se comparte el pan. Es bastante probable que así se llamaba al que estaba tan cerca de uno como para compartir el pan, alimento esencial
El término se impuso en el mundo de la empresa. Los anglosajones prefieren llamar compañías a las empresas. Y de todos modos en la estructura del nombre de innumerables empresas formadas por varios socios, figura después del nombre principal "& cia.", y compañía (el que llaman signo and es en realidad el signo et, en el que la e queda arriba y la t debajo). También en la política, en especial la de izquierdas, se ha usado profusamente el término compañero junto al más difundido de camarada. En la escuela, aunque como denominación de emplea compañero, y así se habla por ejemplo de los compañeros de clase, no lo usan en cambio los escolares para llamarse entre sí (hoy se llaman entre sí chavón, loco, flaco gordo, negro) pero practican el compañerismo.

Compañerismo es lo que cualquier ser social busca cuando integra un grupo, a menos que uno tenga alguna enfermedad social como la soledad o la melancolía. Pero aún el más solitario de los seres humanos, en algún momento de su vida necesito de un compañero.
Jesús practicó el compañerismo. Aunque era Dios encarnado, un ser extremadamente superior a sus semejantes en sabiduría y espiritualidad, buscó compañeros. Eligió a doce y uno de ellos resultó ser traidor del que había decidido compartir el pan con el .Sin embargo, en el momento de la traición, Jesús le dice “Compañero, a que viniste?.Aún en ese momento, no dejó de reconocer su amistad.
Quería que juntos pensemos hoy en nuestros compañeros. En aquellos con quienes diariamente compartís el pan, es decir las cosas esenciales de la vida y en especial la escolar. A aquellos que les prestás los apuntes, con los que compartís tus travesuras, con quien te reís en las buenas y llorás en las malas. El que te pide un pedazo de sándwich y te deja con medio. A los que le compartìs tus penas y alegrìas. Ya se que estás pensando que algunos no se comportan como tales, pero te invito a que vos no hagas como ellos. Que te juegues por tus compañeros. No estoy hablando de amigos, sino aquellos con quienes te tocó compartir lo diario. Tal vez a ese que mirás poco o no tenès en cuenta, es una persona que necesita de tu ayuda o sos el ùnico que puede ayudarlo. No dejes pasar la oportunidad de ser compañero. Se trata de partir y compartir y asì todos nos sentiremos beneficiados.
Hechos 20:34
Ustedes mismos saben bien que estas manos se han ocupado de mis propias necesidades y de las de mis compañeros.

Filipenses 4:3
Y a ti, mi fiel compañero,* te pido que ayudes a los que han luchado a mi lado en la obra del evangelio, junto con Clemente y los demás colaboradores míos

Eclesiastés 4.9-12
Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.

Con cordiales saludos

Carlos

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